Margot

Hace un año, nacieron dos niños en un Hospital en Talca. Al nacer, creo, fueron "confundidos" por algún funcionario y al momento de llevarlos a las casas, dos familias se llevaron al niño equivocado.
Ahora, la gente está en el conflico de seguir criando al hijo que estaban criando o entregarlo y recibir uno genéticamente propio.
Es lo obvio que las personas quieran recibir a un hijo genéticamente propio o, mejor dicho, no permitir que sea criado por otros (aun siendo las mejores personas del mundo) pudiendo criarlos los verdaderos dueños.
Pero el punto es otro.
Ayer, o anteayer, se supo que otra vez habían cometido el error en el mismo hospital. Una señora parió, luego le mostraron a su hija, luego la amamantó. Después se la llevaron por tercera vez y la muy precavida madre miró que en el brazalete identificatorio de la niña, llevaba el nombre de otra persona. Na.... es como mucho... Es decir, recién se está resolviendo lo de los otros niños cambiados y ¿no tienen la precaución de fijarse?
Si yo tuviera algo que ver con ese hospital... estaría muerta de vergüenza... por lo menos. Pero no, al jefe de obstetricia le da lo mismo. Debe ser que no ha hecho exámenes de adn a sus hijos. ¿Serán suyos?
Uy... ¿seré hija de mis padres? Al menos no nací en Talca... lo que no quiere decir que disminuyan las probabilidades. En todas partes se cuecen habas, dicen.
¡¡¡ wwwwaaaaaaaaaaaaaaa !!! ¡¡¡ Quiero conocer mi adn !!!
La Cuarta siempre tiene una versión jejeje.